Los profesionales de las escuelas infantiles en Hortaleza, sabemos que nuestra profesión requiere de ciertas características imprescindibles, algunas innatas y otras aprendidas e interiorizadas, con las que poder desarrollar nuestro día a día con el cuidado y la importancia que merece.
¿Qué características debe tener un buen profesional de la educación infantil? Esta pregunta es clave para aquellas mamás y papás que buscan el mejor cuidado y la mejor atención y educación para sus pequeños.
¿Cómo es un buen profesional de la educación infantil?
Generalizando, como profesionales, las educadoras y los educadores, deben poseer un conocimiento amplio sobre el desarrollo y la psicología infantil, las habilidades de comunicación, las relaciones interpersonales y los principios pedagógicos apropiados para los niños y niñas, entre otros conocimientos.
Una figura clave
La figura del Educador Infantil es clave para el desarrollo de los niños, ya que son ellos quienes les garantizan seguridad, cuidado y cariño en un entorno que no es el familiar.
Esta figura requiere tener una actitud positiva y una gran capacidad empática con los pequeños. Además, deben tener una gran motivación y compromiso con la educación infantil y con el bienestar de los niños y niñas.
Funciones
En cuanto a las funciones, el educador infantil debe estar preparado para planificar y llevar a cabo actividades educativas en todos los aspectos relacionados con el desarrollo infantil, así como para establecer relaciones positivas con los niños y ayudarles a desarrollar sus habilidades, entendiendo además que cada pequeño o pequeña tiene un momento evolutivo determinado a estas edades.
Asimismo, debe ser capaz de entender el comportamiento infantil y saber cómo ayudarles a comprender y controlar sus emociones. Un aspecto muy importante en la infancia.
Sin olvidar que debe cubrir todas las necesidades de alimentación e higiene que los pequeños precisen durante su cuidado.
Aptitudes y actitudes
En cuanto a las aptitudes, el profesional de la educación infantil debe ser habilidoso para trabajar con niños, tener una gran creatividad para desarrollar actividades educativas, educar y enseñar con eficacia y tener una gran capacidad de resolución de problemas para lidiar con situaciones conflictivas, sabiendo escuchar e interpretar ciertos comportamientos, y, haciéndose entender, en muchas ocasiones sin necesidad de palabras.
En cuanto a las actitudes, el educador infantil debe tener una actitud respetuosa hacia los niños y su individualidad, así como un profundo respeto por los valores de los padres. Sin olvidar que debe ser capaz de trabajar en equipo y contar con una actitud positiva frente a la diversidad cultural y social.
Formación
Finalmente vamos a centrarnos en la formación. Evidentemente es otro aspecto clave para el buen desempeño de un profesional de la educación infantil.
La formación necesaria para ser un buen educador infantil incluye amplios conocimientos en disciplinas como la psicología infantil, la pedagogía, la primera infancia, la educación especial, alimentación, etc.
Pero, queremos resaltar, como equipo especializado en la educación y el cuidado de los más pequeños que, para ser un buen profesional de la educación infantil, no sólo es imprescindible contar con una excelente formación académica, sino también con una actitud positiva, una gran vocación y motivación para trabajar con niños y niñas y una gran capacidad de empatía y comprensión.
En Little Clovers creemos que nuestra profesión es una de las más bonitas en las que se puede desarrollar una vida profesional, que va más allá de lo meramente laboral. Somos conscientes de la importancia que tiene nuestro papel en la vida, presente y futura, de nuestr@s niñ@s. Por eso te invitamos a conocer nuestro centro. Si buscas escuelas infantiles en Hortaleza, tienes que venir a conocernos.
